miércoles, 28 de diciembre de 2011

Belén Viviente

Este martes tuvo lugar en nuestra residencia un Belén viviente en el que los protagonistas fueron los residentes de nuestro centro. No le faltaba detalle, nadie quiso perderse el nacimiento de Jesús desde los más mayores hasta los más pequeños.


Un día especial en el que nuestros familiares y amigos llenaron el salón de actos sin dejar un butaca libre. Gracias a todos por apoyarnos y darnos ánimos para a continuar demostrando las grandes cualidades de las que disponen nuestros mayores.


Los más pequeños adorando al niño Jesús

Los Ángeles prepararon hasta el último detalle la llegada del Salvador


Y nuestro amigo Bernardo animó con su música y su guitarra el gran espectáculo




GRACIAS A TODOS
Y
FELICES FIESTAS

domingo, 25 de diciembre de 2011

FELIZ NAVIDAD





¡Feliz Navidad!
Para ti y toda tu familia.

viernes, 23 de diciembre de 2011

Coral Santiago Apostol

Ayer jueves, la Coral Santiago Apostol realizó un concierto de Navidad en nuestra Iglesia. Un acto en el que residentes, hermanitas y familiares quedaron encantados con las maravillosas voces que nos mostraron.





jueves, 22 de diciembre de 2011

Los más jóvenes acompañan a nuestros residentes

Durante estas fechas recibimos la visita de numerosos colegios que acompañados de guitarras y villancicos recorren toda la residencia para alegrar a nuestros ancianitos.


Un año más, el Colegio Apostol Santiago de Vigo nos demostraron su cercanía con nuestros residentes, regalándoles alimentos y acompañándonos con sus cantos.





miércoles, 21 de diciembre de 2011

Un encuentro muy especial

El pasado lunes nuestra residencia recibió un regalo muy especial por estas fechas. la Diputación de Pontevedra además de hacernos entraga de un donativo, trajo comida y regalos para todos los residentes.


Los gaiteiros animaron la mañana con su música por toda la Residencia


Un millón de gracias por vuestra generosidad

domingo, 18 de diciembre de 2011

sábado, 17 de diciembre de 2011

VIDEO EVANGELIO: CUARTO DOMINGO DE ADVIENTO 09 (MAGNIFICAT)


Estamos celebrando hoy el Cuarto Domingo de Adviento, el último antes de Navidad. Toda la liturgia de hoy está traspasada por la cercanía del nacimiento de Jesús, y así como el domingo pasado nos presentaba Juan Bautista, el Precursor, una de las figuras claves del Adviento, hoy nos presenta en María, la mujer encinta, a la figura culminante de este tiempo.

En el texto evangélico de hoy contemplamos en María la alegría generosa y la fecundidad única de la experiencia de fe.


La espera esperanzada

Entre las cosas hermosas que siempre podemos escuchar -y que nos abre los oídos, la mente y el corazón a muchas otras cosas- es cuando alguna mujer cuenta los diálogos silenciosos con su hijo durante los meses de embarazo. Diálogos de una íntima comunión de vida, como no hay otra; diálogos hechos de amor y esperanza, mientras llega el tiempo de tener entre los brazos al hijo, fruto de las entrañas.

Son diálogos que después se prolongaran en el tiempo, de una manera nueva, mientras el hijo va recibiendo y conquistando su autonomía para vivir su misión original en este mundo. Son diálogos que establecen para siempre la unión única entre la madre y el hijo.

La espera esperanzada de la mujer que va a dar a luz es el gran signo del Adviento: María que espera el nacimiento de la criatura que vive en sus entrañas. Esta es, también, la espera de toda la Iglesia en este tiempo.


La espera activa

El relato evangélico de hoy nos presenta a María que con el Niño en sus entrañas parte decidida en una misión de servicio a su prima Isabel.

María que va hacia Isabel es portadora de Jesucristo en su misión de servicio. Aquel que luego dirá que no ha venido a ser servido sino a servir y dar su vida en rescate por muchos (Mc 10, 45), aprendió ya a recorrer su camino de Siervo en el vientre de su Madre que presurosa acude a quien la necesita.

María, figura de la Iglesia, en la visita a su prima Isabel nos muestra con claridad aquello de que la necesidad es la dueña del servicio, y que éste no puede ser determinado desde nosotros mismos, sino desde las necesidades de los demás y del mundo.

Así también, nosotros, como Iglesia estamos llamados a vivir en una espera activa, que no se repliega en la desconfianza ni en las propias necesidades, sino aprendiendo a acoger los llamados que brotan de nuestro mundo y saliendo presurosos a servirle, llevando a Jesucristo al corazón de las necesidades de los hombres y mujeres de nuestro tiempo.


Creerle a Dios

El encuentro de las dos mujeres -María e Isabel- que esperan el nacimiento de las criaturas que viven en sus entrañas -Jesús, una; Juan el Bautista, la otra- nos muestra como el Espíritu pone de manifiesto la presencia y acción salvadora de Dios en medio de las sencillas realidades de este mundo que, aparentemente, no tienen nada de especial.

La exultación de Isabel es alabanza de la fe de María, por la que concibió al Hijo en su seno. María es la que ha creído lo que Dios le ha dicho -por inimaginable y complicado que ello fuera- y se ha fiado de Dios, consintiendo a su Palabra y colaborando así en la obra de salvación.

En este último domingo de Adviento, próxima ya la celebración de Navidad, contemplaremos a María como la persona más fecunda y eficaz de toda la historia, pues es la que trae a Jesucristo a nuestro mundo. Contemplaremos en María la eficacia de la Palabra de Dios cuando ella es acogida con fe y consentimos a colaborar con ella. Pidamos esta gracia de creerle a Dios y fiarnos de Él, para nosotros y para toda la Iglesia: allí, en nuestra respuesta de fe, Dios quiere regalarnos una fecundidad insospechada al realizar su plan de salvación para toda la humanidad.

jueves, 15 de diciembre de 2011

¡Vamos a cantar villancicos!

Durante todo el mes de diciembre llegan a nuestra residencia grupos de canto que con su música intenta hacer de diciembre un mes especial. La alegría invade a nuestros residentes, quienes también colaboran cantando los villancicos más tradicionales.


Actuación del grupo "cuerdas y voces" del centro social de Coia el pasado martes


El próximo sábado contaremos con el Coro de beiramar, finalistas del Certamen de Villancicos de NovaCaixaGalicia.

sábado, 10 de diciembre de 2011

jueves, 8 de diciembre de 2011


ORACIÓN
¡Virgen Santísima, que agradaste al Señor y fuiste su Madre; inmaculada en el cuerpo, en el alma, en la fe y en el amor! Por piedad, vuelve benigna los ojos a los fieles que imploran tu poderoso patrocinio. La maligna serpiente, contra quien fue lanzada la primera maldición, sigue combatiendo con furor y tentando a los miserables hijos de Eva. ¡Ea, bendita Madre, nuestra Reina y Abogada, que desde el primer instante de tu concepción quebrantaste la cabeza del enemigo! Acoge las súplicas de los que, unidos a ti en un solo corazón, te pedimos las presentes ante el trono del Altísimo para que no caigamos nunca en las emboscadas que se nos preparan; para que todos lleguemos al puerto de salvación, y, entre tantos peligros, la Iglesia y la sociedad canten de nuevo el himno del rescate, de la victoria y de la paz. Amén.

sábado, 3 de diciembre de 2011

SEGUNDO DOMINGO DE ADVIENTO






Allanad los senderos del Señor

« Comienza el Evangelio de Jesucristo, Hijo de Dios. »

« Está escrito en el Profeta Isaías: ‘ Yo envío mi mensajero delante de ti para que te prepare el camino. Una voz grita en el desierto: Preparadle el camino al señor, allanad sus senderos‘ . Juan bautizaba en el desierto: predicaba que se convirtieran y se bautizaran, para que se les perdonasen los pecados. Acudía la gente de Judea y de Jerusalén, confesaban sus pecados y él los bautizaba en el Jordán. Juan iba vestido de piel de camello, con una correa de cuero a la cintura y se alimentaba de saltamontes y miel silvestre. Y proclamaba: ‘Detrás de mí viene el que puede más que yo, y yo no merezco agacharme para desatarle las sandalias. Yo os he bautizado con agua, pero él os bautizará con Espíritu Santo‘. »

Reflexión

Guía:
La venida de Cristo exige una continua conversión. El tiempo del Adviento, es una llamada a la conversión para preparar los caminos del Señor y acoger al Señor que viene. El Señor ya no quiere nacer en una cueva, el Señor quiere nacer, ahora, en cada uno de los corazones de los hombres.

viernes, 2 de diciembre de 2011

Mes de Diciembre

Llega diciembre, un mes de alegría y de ilusión, de reencuentros con la familia, un mes de fiesta para celebrar el más grande de todos los regalos; el nacimiento de Jesús.

Por ello en el salón de actos de nuestra residencia acogemos a varios grupos musicales; para celebrar todos unidos, esta gran fiesta con nuestras hermanitas,residentes y familiares.




2 de diciembre: Grupo amistad (de la Iglesia de la Inmaculada)
13 de diciembre: "Cuerdas y voces" (del centro socail de Coia)
18 de diciembre: Grupo Sehiva
22 de Diciembre: Coral Apostol Santiago
29 de diciembre: Escola Cantorum Santa Cecilia

3 de Enero: Coral San Miguel de Oia
4 de Enero: Coro de la Iglesia de San Francisco



OS ESPERAMOS

martes, 29 de noviembre de 2011

Hoy comienza la novena de la Inmaculada Concepción





Novena a la Inmaculada Concepción


MODO DE HACER LA NOVENA

Puestos de rodillas, delante de una imagen de la Inmaculada Concepción, se santiguará y luego dirá todos los días el siguiente

ACTO DE CONTRICCIÓN

Señor mío Jesucristo, Dios y hombre verdadero. Ante vuestra divina presencia reconozco que he pecado muchas veces y porque os amo sobre todas las cosas, me pesa de haberos ofendido. Ayudado de vuestra divina gracia, propongo no volver a caer más, confesarme y cumplir la penitencia que el confesor me imponga. Amén.

ORACIÓN PREPARATORIA PARA TODOS LOS DÍAS

Dios te salve, María, llena de gracia y bendita más que todas las mujeres, Virgen singular, Virgen soberana y perfecta, elegida para Madre de Dios y preservada por ello de toda culpa desde el primer instante de tu Concepción; así como por Eva nos vino la muerte, así nos viene la vida por ti, que, por la gracia de Dios, has sido elegida para ser madre del nuevo pueblo que Jesucristo ha formado con su sangre.

A ti, purísima Madre, restauradora del caído linaje de Adán y Eva, venimos confiados y suplicantes en esta Novena, para rogarte nos concedas la gracia de ser verdaderos hijos tuyos y de tu Hijo Jesucristo, libres de toda mancha de pecado. Acordaos, Virgen Santísima, que habéis sido hecha Madre de Dios, no sólo para vuestra dignidad y gloria, sino también para salvación nuestra y provecho de todo el género humano. Acordaos que jamás se ha oído decir que uno solo de cuantos han acudido a vuestra protección e implorado vuestro socorro haya sido desamparado.

No me dejéis pues a mí tampoco, porque si no, me perderé; que yo tampoco quiero dejaros a Vos, antes bien cada día quiero crecer más en vuestra verdadera devoción. Y alcanzadme principalmente estas tres gracias: la primera, no cometer jamás pecado mortal; la segunda, un gran aprecio de la virtud, y la tercera, una buena muerte. Además dadme la gracia particular que os pido en esta Novena, si es para mayor gloria de Dios, vuestra y bien de mi alma.

ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS

Bendita sea tu pureza
Y eternamente lo sea,
Pues todo un Dios se recrea
En tan graciosa belleza.
A ti, celestial Princesa,
Virgen sagrada María,
Te ofrezco en este día
Alma, vida y corazón.
¡Mírame con compasión!
¡No me dejes, madre mía!


DÍA PRIMERO

De rodillas, hecha la señal de la cruz, se dirá el acto de contrición y la oración preparatoria para todos los días

ORACIÓN

¡Oh Santísimo Hijo de Marla Inmaculada y benignísimo Redentor nuestro! Así como preservaste a María del pecado original en su Inmaculada Concepción y a nosotros nos hiciste el gran beneficio de librarnos de él por medio de tu santo bautismo, así Te rogamos humildemente nos concedas la gracia de portarnos siempre como buenos cristianos, regenerados en Ti, Padrenuestro Santísimo.

Rezar tres Padrenuestros, Avemarías y Gloria Patris a la Santísima Trinidad, y luego pide lo que por intercesión de la Inmaculada Concepción deseas conseguir de esta Novena.

A continuación se dirá la Oración final para todos los días y la Letanía a la Virgen,

DÍA SEGUNDO

De rodillas, hecha la señal de la cruz, se dirá el acto de contrición y la oración preparatoria como el día primero.

ORACIÓN

¡Oh Santísimo Hijo de María Imnaculada y benignísimo Redentor nuestro! Así como preservaste a María de todo pecado mortal en toda su vida y a nosotros nos das gracia para evitarlo y el sacramento de la confesión para remediarlo, así Te rogamos humildemente, por intercesión de tu Madre Inmaculada, nos concedas la gracia de no cometer nunca pecado mortal, y si incurrimos en tan terrible desgracia, la de salir de él cuanto antes, por medio de una buena confesión.

Rezar tres Padrenuestros, Avemarías y Gloria Patris a la Santísima Trinidad, y luego pide lo que por intercesión de la Inmaculada Concepción deseas conseguir de la Novena.

A continuación se dirá la Oración final para todos los días y la Letanía a la Virgen.

DÍA TERCERO

De rodillas~ hecha la señal de la cruz, se dirá el acto de contrición y la oración preparatoria como el día primero.

ORACIÓN

¡Oh santísimo Hijo de María Inmaculada y benignísimo Redentor nuestro! Así como preservaste a María de todo pecado venial en toda su vida, y a nosotros nos pides que purifiquemos más y más nuestras almas, para ser dignos de Ti, así Te rogamos humildemente, por intercesión de tu Madre Inmaculada, nos concedas la gracia de evitar los pecados veniales y de procurar y obtener cada día más pureza y delicadeza de conciencia.

Rezar tres Padrenuestros, Avemarías y Gloria Patris a la Santísima Trinidad, y luego pide lo que por intercesión de la Inmaculada Concepción deseas conseguir de la Novena.

A continuación se dirá la Oración final para todos los días y la Letanía a la Virgen.

DÍA CUARTO

De rodillas, hecha la señal de la cruz, se dirá el acto de contrición y la oración preparatoria como el día primero.

ORACIÓN

¡Oh Santísimo Hijo de María Inmaculada y benignísimo Redentor nuestro! Así como libraste a María del pecado y le diste dominio perfecto sobre todas sus pasiones, así Te rogamos humildemente, por intercesión de tu Madre Inmaculada, nos concedas la gracia de ir domando nuestras pasiones y destruyendo nuestras malas inclinaciones, para que Te podamos servir con verdadera libertad de espíritu y sin imperfección ninguna.

Rezar tres Padrenuestros, Avemarías y Gloria Patris a la Santísima Trinidad, y luego pide lo que por intercesión de la Inmaculada Concepción deseas conseguir de la Novena,

A continuación se dirá la Oración final para todos los días y las Letanías a la Virgen.

DÍA QUINTO

De rodillas, hecha la señal de la cruz, se dirá el acto de contrición y la oración preparatoria como el día primero.

ORACIÓN

¡Oh Santísimo Hijo de María Inmaculada y benignísimo Redentor nuestro! Así como desde el primer instante de su Concepción diste a María mas gracia que a todos los Santos y Angeles del cielo, así Te rogamos humildemente por intercesión de tu Madre Inmaculada nos inspires un aprecio singular de la divina gracia que Tú nos adquiriste con tu sangre y nos concedas el aumentarla más y más con nuestras buenas obras y con la recepción de tus santos sacramentos, especialmente el de la comunión.

Rezar tres Padrenuestros, Avemarías y Gloria Patris a la Santísima Trinidad, y luego pide lo que por intercesión de la Inmaculada Concepción deseas conseguir de la Novena.

A continuación se dirá la Oración final para cada día y la Letanía de la Virgen.

DÍA SEXTO

De rodillas, hecha la señal de la cruz, se dirá el acto de contrición y la oración preparatoria como el día primero.

ORACIÓN

¡Oh Santísimo Hijo de María Inmaculada y benignísimo Redentor nuestro! Así como desde el primer instante infundiste en María, con toda plenitud, las virtudes sobrenaturales y los dones del Espíritu Santo, así Te suplicamos humildemente, por intercesión de tu Madre Inmaculada, nos concedas a nosotros la abundancia de estos mismos dones y virtudes, para que podamos vencer todas las tentaciones y hagamos muchos actos de virtud dignos de nuestra profesión de cristianos.

Rezar tres Padrenuestros, Avemarías y Gloria Patris a la Santísima Trinidad, y luego pide lo que por intercesión de la Inmaculada Concepción deseas conseguir de la Novena.

A continuación se dirá la Oración final para todos los días y la Letanía a la Virgen.

DÍA SEPTIMO

De rodillas, hecha la señal de la cruz, se dirá el acto de contrición y la oración preparatoria como el día primero.

ORACIÓN

¡Oh Santísimo Hijo de María Inmaculada y benignísimo Redentor nuestrol Así como diste a María, entre las demás virtudes, una pureza y castidad eximia, por la cual es llamada Virgen de las Vírgenes, así Te suplicamos, por intercesión de tu Madre Inmaculada, nos concedas la dificilísima virtud de la castidad, que no se puede conservar sin tu gracia, pero que tantos han conservado mediante la devoción de la Virgen y tu protección.



Rezar tres Padrenuestros, Avemarías y Gloria Patris a la Santísima Trinidad, y luego pide lo que por intercesión de la Inmaculada Concepción deseas conseguir de la Novena.

A continuación se dirá la Oración final para todos los días y la Letanía de la Virgen.

DÍA OCTAVO

De rodillas, hecha la señal de la cruz, se dirá el acto de contrición y la oración preparatoria como el día primero.

ORACIÓN

¡Oh Santísimo Hijo de María Inmaculada y benignísimo Redentor nuestro! Así como diste a María la gracia de una ardentísima caridad y amor de Dios sobre todas las cosas, así Te rogamos humildemente, por intercesión de tu Madre Inmaculada, nos concedas un amor sincero a Ti, oh Dios y Señor nuestro, nuestro verdadero bien, nuestro bienhechor, nuestro Padre, y que antes queramos perder todas las cosas que ofenderte con un solo pecado.

Rezar tres Padrenuestros, Avemarías y Gloria Patris a la Santísima Trinidad, y luego pide lo que por intercesión de la Inmaculada Concepción deseas conseguir de la Novena.

A continuación se dirá la Oración final para todos los días y la Letanía a la Virgen.

DÍA NOVENO

De rodillas, hecha la señal de la cruz, se dirá el acto de contrición y la oración preparatoria como el día primero.

ORACIÓN

¡Oh Santísimo Hijo de María Inmaculada y benignisimo Redentor nuestro! Así como has concedido a María la gracia de ir al cielo y de ser en él colocada en el primer lugar después de Ti, así Te suplicamos humildemente, por intercesión de tu Madre Inmaculada, nos concedas una buena muerte, que recibamos bien los últimos sacramentos, que expiremos sin mancha ninguna de pecado en la conciencia y vayamos al cielo para siempre gozar en tu compañía y la de nuestra Madre, con todos los que se han salvado por ella

sábado, 26 de noviembre de 2011

EL AÑO LITÚRGICO
ADVIENTO
P. Rufino María Grández, ofmcap.

Poema de la Corona de Adviento


Preparemos la Corona de Adviento: cuatro domingos, cuatro etapas que trazan el camino espiritual hacia el Misterio de la natividad del Señor. Los evangelios de los cuatro domingos (lo mismo en el ciclo A, que en el ciclo B, que en el ciclo C) son nuestra guía espiritual, y han sido seleccionados de esta manera:

 Primer domingo, la Venida del Señor al final de la historia. Vigilancia.

 Segundo domingo, la figura de Juan Bautista. Conversión y preparación activa para la Venida del Señor;

 Tercer domingo, también Juan Bautista, que nos orienta a la persona de Aquél que viene y nos trae la Salvación. Alegría, inexhausta alegría. Gaudete in Domino; alegraos en el Señor.

 Cuarto domingo, el misterio de la Encarnación en el vientre de una mujer. María. Expectación, ternura.

Color de Adviento, el morado, pero el Adviento no es una segunda Cuaresma. “El tiempo del Adviento tiene dos características: es a la vez un tiempo de preparación a las solemnidades de Navidad en que se conmemora la primera Venida de Hijo de Dios entre los hombres, y un tiempo en el cual, mediante esta celebración, la fe se dirige a esperar la segunda Venida de Cristo al fin de los tiempos. Por estos dos motivos, el Adviento se presenta como un tiempo de piadosa alegre esperanza” (Calendario Romano n.39). El tercer domingo puede sustituirse el color morado por el “rosado”, por el mensaje de intensa alegría. El mantel de la celebración eucarística siempre es blanco para poner en evidencia que es la celebración del banquete pascual.

Color de las velas de la Corona. No hay nada fijado, y, por otra parte, no se trata de un rito litúrgico. Todo depende del simbolismo que se quiera sugerir. Acaso, con lo que se acaba de explicar, puede convenir: Primer y segundo domingo, cirio morado; tercer domingo, cirio rosado (alegría); cuarto domingo, cirio blanco (Virgen María).



Apertura

1. Corona de Adviento,
verdor de esperanza,
al Verbo Encarnado
la Iglesia proclama.
Con ramas fragantes,
con fúlgidas lámparas
con la poesía
nacida en las almas.

2. Corona de Dios
que Él mismo regala:
el Hijo del Rey
su Boda prepara.
Corona de triunfo
que espera en la patria,
el fin del Adviento
será nuestra Pascua.


Lámpara del primer domingo de Adviento
Evangelios: Mt 24,37-44; Mc 13,33-37; Lc 21,25-28.34-36

3. Con lámparas vivas
salid a su encuentro;
es Cristo que viene
con gloria en su reino.
Señor de la historia
y juez de los tiempos;
vendrá con sus santos,
la cruz por trofeo.

4. De todos los hombres
el Hijo más bello,
Esposo divino,
la gloria del cielo.
De Dios Trinidad,
Jesús Heredero,
Hermano entre hermanos,
Jesús primogénito.


Lámpara del segundo domingo de Adviento
Evangelios: Mt 3,1-11; Mc 1,1-8; Lc 3,1-6

5. Haced penitencia
clamaba el Bautista,
con firmes propósitos
que cambien la vida.
Dejad los pecados,
rencores y envidias;
matad viejos odios
y toda injusticia.

6. Quien tenga dos túnicas
comparta y divida;
y al pobre y hambriento
le lleve comida.
Yo soy mensajero,
yo soy voz que grita:
quien viene detrás
él es el Mesías.


Lámpara del tercer domingo de Adviento
Evangelios: Mt 11,2-11; Mc Jn 1,6-8. 19-28; Lc 3,10-18

7. Marchad y anunciad
a todos los vientos,
las misericordias
que en Él estáis viendo:
los ciegos y cojos
ya danzan contentos;
y de los sepulcros
se yerguen los muertos.

8. Es Cristo Mesías
en su Advenimiento:
llegó la alegría
en el sufrimiento;
Jesús Redentor
cambió el universo;
:Adán ha llorado:
¡termine el lamento!


Lámpara del cuarto domingo de Adviento
Evangelios: Mt 1,18-24; Mc 1,26-38; Lc 1,39-45

9. La Virgen María
se siente a la espera,
y adora en silencio
a Dios a quien lleva.
A ella cantaron
los santos profetas;
los pobres y humildes
marcaban la huella.

10. Oh Madre purísima,
de suma belleza,
tu seno es la cuna
del Verbo que llega.
Y tú eres, oh Madre,
la llave y la Puerta:
por santa María
Dios es carne nuestra.


Puebla de los Ángeles (México),
21 noviembre 2011.


sábado, 19 de noviembre de 2011

Cristo Rey



Domingo XXXIV del tiempo ordinario: Jesucristo, Rey del Universo (A)
Texto del Evangelio (Mt 25,31-46): En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Cuando el Hijo del hombre venga en su gloria acompañado de todos sus ángeles, entonces se sentará en su trono de gloria. Serán congregadas delante de Él todas las naciones, y Él separará a los unos de los otros, como el pastor separa las ovejas de los cabritos. Pondrá las ovejas a su derecha, y los cabritos a su izquierda.

»Entonces dirá el Rey a los de su derecha: ‘Venid, benditos de mi Padre, recibid la herencia del Reino preparado para vosotros desde la creación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; era forastero, y me acogisteis; estaba desnudo, y me vestisteis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a verme’. Entonces los justos le responderán: ‘Señor, ¿cuándo te vimos hambriento, y te dimos de comer; o sediento, y te dimos de beber?’. ¿Cuándo te vimos forastero, y te acogimos; o desnudo, y te vestimos? ¿Cuándo te vimos enfermo o en la cárcel, y fuimos a verte?’. Y el Rey les dirá: ‘En verdad os digo que cuanto hicisteis a unos de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis’.

»Entonces dirá también a los de su izquierda: ‘Apartaos de mí, malditos, al fuego eterno preparado para el Diablo y sus ángeles. Porque tuve hambre, y no me disteis de comer; tuve sed, y no me disteis de beber; era forastero, y no me acogisteis; estaba desnudo, y no me vestisteis; enfermo y en la cárcel, y no me visitasteis’. Entonces dirán también éstos: ‘Señor, ¿cuándo te vimos hambriento o sediento o forastero o desnudo o enfermo o en la cárcel, y no te asistimos?’. Y Él entonces les responderá: ‘En verdad os digo que cuanto dejasteis de hacer con uno de estos más pequeños, también conmigo dejasteis de hacerlo’. E irán éstos a un castigo eterno, y los justos a una vida eterna».

Comentario: P. Antoni POU OSB Monje de Montserrat (Montserrat, Barcelona, España)
«Cuanto hicisteis a unos de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis»
Hoy, Jesús nos habla del juicio definitivo. Y con esa ilustración metafórica de ovejas y cabras, nos hace ver que se tratará de un juicio de amor. «Seremos examinados sobre el amor», nos dice san Juan de la Cruz.

Como dice otro místico, san Ignacio de Loyola en su meditación Contemplación para alcanzar amor, hay que poner el amor más en las obras que en las palabras. Y el Evangelio de hoy es muy ilustrativo. Cada obra de caridad que hacemos, la hacemos al mismo Cristo: «(…) Porque tuve hambre, y me disteis de comer; era forastero, y me acogisteis; estaba desnudo, y me vestisteis; en la cárcel, y vinisteis a verme» (Mt 25,34-36). Más todavía: «Cuanto hicisteis a unos de estos hermanos míos más pequeños, a mí me lo hicisteis» (Mt 25,40).

Este pasaje evangélico, que nos hace tocar con los pies en el suelo, pone la fiesta del juicio de Cristo Rey en su sitio. La realeza de Cristo es una cosa bien distinta de la prepotencia, es simplemente la realidad fundamental de la existencia: el amor tendrá la última palabra.

Jesús nos muestra que el sentido de la realeza -o potestad- es el servicio a los demás. Él afirmó de sí mismo que era Maestro y Señor (cf. Jn 13,13), y también que era Rey (cf. Jn 18,37), pero ejerció su maestrazgo lavando los pies a los discípulos (cf. Jn 13,4 ss.), y reinó dando su vida. Jesucristo reina, primero, desde una humilde cuna (¡un pesebre!) y, después, desde un trono muy incómodo, es decir, la Cruz.

Encima de la cruz estaba el cartel que rezaba «Jesús Nazareno, Rey de los judíos» (Jn 19,19): lo que la apariencia negaba era confirmado por la realidad profunda del misterio de Dios, ya que Jesús reina en su Cruz y nos juzga en su amor. «Seremos examinados sobre el amor».

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Camino de las Hermanitas de los Desamparados



Mónica Aleria cuenta a PARAULA su vocación en
Filipinas
Por primera vez, una joven de Asia ha tornado el hábito de la
congregación de las Hermanitas de los Ancianos Desamparados.
Se trata de la filipina Mónica Aleria Corpuz, de 19 años.
Mónica llegó a Valencia el 11 de enero. “Desde que vine, todos los
días me parecen nuevos”, comenta con alegría. Aquí vive en
comunidad y recibe formación humana, cultural, teológica, moral
y religiosa. Pero además de prepararse, Mónica ayuda en las
labores de la casa con los ancianos. “Me llena de verdad cuando
hago actos de amor al Señor por medio de mis hermanas, de los
ancianos y de los que me rodean”.
Mónica procede de una familia cristiana de la localidad filipina de Pangasinan. Desde pequeña
se sintió atraída por las monjas, en especial por las que le ensenaban catecismo. “Con 7 años
yo ya empezaba a oír la llamada de Dios, aunque entonces aún no lo sabía”, señala.
A los 12 años recibió el Bautismo. Recuerda que “estaba emocionada y era muy feliz porque
finalmente pertenecía a Dios y a la Iglesia”.
Durante todo ese tiempo, Mónica seguía con la idea de ser religiosa, pero al llegar al bachiller,
“me olvidé un poco porque estaba muy ocupada”, con los estudios, los amigos y cuidando a
sus hermanitos ‐es la mayor de 5 hermanos‐. “Pensaba que lo tenía todo pero estaba
equivocada”, reconoce. “Buscaba más cosas para encontrar la verdadera felicidad pero no la
encontré. Sentía un gran vacío y empecé a preguntarme: y ahora, ¿qué voy a hacer?”, explica.
Fue posteriormente, al apuntarse al coro de su parroquia, cuando Mónica descubrió y
encontró lo que le hacía verdaderamente feliz. “Casi vivía en la Iglesia porque teníamos
ensayo todos los días y, además, yo iba una hora antes para estar con el Señor”.
Papel esencial de su madre
Tras participar en unos ejercicios espirituales, su deseo de la infancia volvió con más intensidad.
En esos momentos fue fundamental para ella la actitud de su madre porque, ante el
temor a la separación, su madre siempre le decía: “El Señor me prestó una hija y tengo que
devolvérsela. Mónica, si estás decidida, te apoyamos. Y nuestra casa estará siempre abierta si
cambias de opinión”.
Mónica había empezado a estudiar Magisterio, por eso realizó convivencias con
congregaciones dedicadas a la enseñanza, “pero me di cuenta de que eso no era para mí, no
me satisfacía”. Al conocer en 2009, a través de una amiga, a las Hermanitas de los Ancianos
Desamparados, que acababan de abrir su primera residencia en Asia, precisamente en
Manila, reconoce que sintió “el deseo de quedarme con ellas en ese mismo momento”.
Empezó en la congregación el 17 de mayo de 2009. Tuvo que aprender castellano porque la
formación tenía que recibirla aquí, en la Casa madre. Mónica reconoce que le costó dejar su
país “pero el Señor da la fortaleza en el momento oportuno”. Además, se ha sentido apoyada
por todas las hermanitas “que me aconsejaban y animaban mucho”.
Tomó el hábito de la Congregación en una ceremonia privada que tuvo lugar en la Casa
general de la Congregación ubicada en la calle Madre Teresa Jornet, 1 de Valencia, el día 14
de octubre. (Publicado en Paraula –Iglesia en Valencia‐, domingo 30‐X‐2011)

lunes, 14 de noviembre de 2011

Arzobispado de Mérida- Badajoz



El Arzobispo de Mérida-Badajoz, Monseñor Santiago García Aracil, entregó el pasado domingo en la Catedral metropolitana las medallas de la Diócesis, en el marco del Día de la Iglesia Diocesana. Esta distinción fue instituida por el propio Arzobispo en el año 2008 con el objetivo de reconocer la labor de los galardonados.
En esta ocasión recibieron la distinción el sacerdote diocesano de mayor edad, Diego Barrena Gómez, con 96 años de edad, por su incesante labor pastoral, desde que se ordenara sacerdote, en 1942. Desde entonces ha pasado por las localidades de Arroyomolinos de Montánchez, Montemolín, Segura de León, la barriada de San Fernando, en Badajoz, y, a día de hoy, en su pueblo natal, Calamonte, donde continúa echando una mano; a Julián Peña Ripado, Ecónomo General de la Diócesis, por su permanente dedicación al servicio de la Iglesia, su presencia evangelizadora en los distintos ambientes de su vida y su capacidad de acogida; y por último, a las Hermanitas de los Ancianos Desamparados, que cuentan con casas en Azuaga, Mérida y Badajoz, por su exquisita atención a los mayores con menos recursos en las residencias que regentan y además, en los últimos años acogiendo a sacerdotes mayores.

Encuentro de los jóvenes con nuestros residentes

Nuestros residentes disfrutan en el día a día de las diferentes actividades y en compañía de los jóvenes que les dan muestras de cariño y con ellos se sienten felices y satisfechos.












sábado, 5 de noviembre de 2011

Contemplar el Evangelio

DomingoXXXII (A) del tiempo ordinario

Texto del Evangelio (Mt 25,1-13): En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: «El Reino de los Cielos será semejante a diez vírgenes, que, con su lámpara en la mano, salieron al encuentro del novio. Cinco de ellas eran necias, y cinco prudentes. Las necias, en efecto, al tomar sus lámparas, no se proveyeron de aceite; las prudentes, en cambio, junto con sus lámparas tomaron aceite en las alcuzas. Como el novio tardara, se adormilaron todas y se durmieron.

»Mas a media noche se oyó un grito: ‘¡Ya está aquí el novio! ¡Salid a su encuentro!’. Entonces todas aquellas vírgenes se levantaron y arreglaron sus lámparas. Y las necias dijeron a las prudentes: ‘Dadnos de vuestro aceite, que nuestras lámparas se apagan’. Pero las prudentes replicaron: ‘No, no sea que no alcance para nosotras y para vosotras; es mejor que vayáis donde los vendedores y os lo compréis’. Mientras iban a comprarlo, llegó el novio, y las que estaban preparadas entraron con él al banquete de boda, y se cerró la puerta.

»Más tarde llegaron las otras vírgenes diciendo: ‘¡Señor, señor, ábrenos!’. Pero él respondió: ‘En verdad os digo que no os conozco’. Velad, pues, porque no sabéis ni el día ni la hora».

Comentario: Rev. P. Anastacio URQUIZA Fernández MCIU (Monterrey, México)
«¡Ya está aquí el novio! ¡Salid a su encuentro!»
Hoy, se nos invita a reflexionar sobre el fin de la existencia; se trata de una advertencia del Buen Dios acerca de nuestro fin último; no juguemos, pues, con la vida. «El Reino de los Cielos será semejante a diez vírgenes, que, con su lámpara en la mano, salieron al encuentro del novio» (Mt 25,1). El final de cada persona dependerá del camino que se escoja; la muerte es consecuencia de la vida -prudente o necia- que se ha llevado en este mundo. Muchachas necias son las que han escuchado el mensaje de Jesús, pero no lo han llevado a la práctica. Muchachas prudentes son las que lo han traducido en su vida, por eso entran al banquete del Reino.

La parábola es una llamada de atención muy seria. «Velad, pues, porque no sabéis ni el día ni la hora» (Mt 25,13). No dejen que nunca se apague la lámpara de la fe, porque cualquier momento puede ser el último. El Reino está ya aquí. Enciendan las lámparas con el aceite de la fe, de la fraternidad y de la caridad mutua. Nuestros corazones, llenos de luz, nos permitirán vivir la auténtica alegría aquí y ahora. Los que viven a nuestro alrededor se verán también iluminados y conocerán el gozo de la presencia del Novio esperado. Jesús nos pide que nunca nos falte ese aceite en nuestras lámparas.

Por eso, cuando el Concilio Vaticano II, que escoge en la Biblia las imágenes de la Iglesia, se refiere a esta comparación del novio y la novia, y pronuncia estas palabras: «La Iglesia es también descrita como esposa inmaculada del Cordero inmaculado, a la que Cristo amó y se entregó por ella para santificarla, la unió consigo en pacto indisoluble e incesantemente la alimenta y la cuida. A ella, libre de toda mancha, la quiso unida a sí y sumisa por el amor y la fidelidad».

martes, 1 de noviembre de 2011

FIESTA DE TODOS LOS SANTOS



La Iglesia nos manda echar en este día una mirada al cielo, que es nuestra futura patria, para ver allí con San Juan, a esa turba magna, a esa muchedumbre incontable de Santos, figurada en esas series de 12,000 inscritos en el Libro de la Vida, - con el cual se indica un número incalculable y perfecto, - y procedentes de Israel y de toda nación, pueblo y lengua, los cuales revestidos de blancas túnicas y con palmas en las manos, alaban sin cesar al Cordero sin mancilla. Cristo, la Virgen, los nueve coros de ángeles, los Apóstoles y Profetas, los Mártires con su propia sangre purpurados, los Confesores, radiantes con sus blancos vestidos, y los castos coros de Vírgenes forman ese majestuoso cortejo, integrado por todos cuantos acá en la tierra se desasieron de los bienes caducos y fueron mansos, mortificados, justicieros, misericordiosos, puros, pacíficos y perseguidos por Cristo. Entre esos millones de Justos a quienes hoy honramos y que fueron sencillos fieles de Jesús en la tierra, están muchos de los nuestros, parientes, amigos, miembros de nuestra familia parroquial, a los cuales van hoy dirigidos nuestros cultos. Ellos adoran ya al Rey de reyes y Corona de todos los Santos y seguramente nos alcanzarán abundantes misericordias de lo alto.

Esta fiesta común ha de ser también la nuestra algún día, ya que por desgracia son muy contados los que tienen grandes ambiciones de ser santos, y de amontonar muchos tesoros en el cielo. Alegrémonos, pues, en el Señor, y al considerarnos todavía bogando en el mar revuelto, tendamos los brazos, llamemos a voces a los que vemos gozar ya de la tranquilidad del puerto, sin exposición a mareos ni tempestades. Ellos sabrán compadecerse de nosotros, habiendo pasado por harto más recias luchas y penalidades que las nuestras. Muy necios seríamos si pretendiéramos subir al cielo por otro camino que el que nos dejó allanado Cristo Jesús y sus Santos.

La Sagrada Biblia llama "Santo" a aquello que está consagrado a Dios. La Iglesia Católica ha llamado "santos" a aquellos que se han dedicado a tratar de que su propia vida le sea lo más agradable posible a Nuestro Señor.

Hay unos que han sido "canonizados", o sea declarados oficialmente santos por el Sumo Pontífice, porque por su intercesión se han conseguido admirables milagros, y porque después de haber examinado minuciosamente sus escritos y de haber hecho una cuidadosa investigación e interrogatorio a los testigos que lo acompañaron en su vida, se ha llegado a la conclusión de que practicaron las virtudes en grado heroico.

Para ser declarado "Santo" por la Iglesia Católica se necesita toda una serie de trámites rigurosos. Primero una exhaustiva averiguación con personas que lo conocieron, para saber si en verdad su vida fue ejemplar y virtuosa. Si se logra comprobar por el testimonio de muchos que su comportamiento fue ejemplar, se le declara "Siervo de Dios". Si por detalladas averiguaciones se llega a la conclusión de que sus virtudes, fueron heroicas, se le declara "Venerable". Más tarde, si por su intercesión se consigue algún milagro totalmente inexplicable por medios humanos, es declarado "Beato". Finalmente si se consigue un nuevo y maravillosos milagro por haber pedido su intercesión, el Papa lo declara "santo".

Para algunos santos este procedimiento de su canonización ha sido rapidísimo, como por ejemplo para San Francisco de Asís y San Antonio, que sólo duró 2 años. Poquísimos otros han sido declarados santos seis años después de su muerte, o a los 15 o 20 años. Para la inmensa mayoría, los trámites para su beatificación y canonización duran 30, 40,50 y hasta cien años o más. Después de 20 o 30 años de averiguaciones, la mayor o menor rapidez para la beatificación o canonización, depende de que obtenga más o menos pronto los milagros requeridos.

Los santos "canonizados" oficialmente por la Iglesia Católica son varios millares. Pero existe una inmensa cantidad de santos no canonizados, pero que ya están gozando de Dios en el cielo. A ellos especialmente está dedicada esta fiesta de hoy.

La Santa Biblia afirma que al Cordero de Dios lo sigue una multitud incontable.

En el cielo están San Chofer de bus y Santa Lavandera de ropa. San Mensajero y Santa Secretaria. Santa Madre de familia y San Gerente de Empresa. San Obrero de construcción y San Agricultor. San Colegial y Santa Estudiante. Santa Viuda, Santa Solterona, Santa Niña y Santa Anciana. San Sacerdote, San Obispo, San Pontífice, San Limosnero, San Celador, Santa Cocinera, San Arrendatario y San Millonario, y muchos más que amaron a Dios y cumplieron sus deberes de cada día.

Señor Jesús: que cada uno de nosotros logremos formar también parte un día en el cielo para siempre del número de tus santos, de los que te alabaremos y te amaremos por los siglos de los siglos. Amén.

Esta es la voluntad de Dios: Que lleguemos a la santidad.


domingo, 30 de octubre de 2011

EVANGELIO DEL DIA: Los que anhelan los primeros puestos en los banquetes...

San Mateo 23, 1-12

Los que anhelan los primeros puestos en los banquetes

Mat 23:1 Entonces Jesús habló a las multitudes y a sus discípulos
Mat 23:2 diciendo: -En la cátedra de Moisés se han sentado los escribas y los fariseos.
Mat 23:3 Haced y cumplid todo cuanto os digan; pero no obréis como ellos, pues dicen pero no hacen.
Mat 23:4 Atan cargas pesadas e insoportables y las echan sobre los hombros de los demás, pero ellos ni con uno de sus dedos quieren moverlas.
Mat 23:5 Hacen todas sus obras para que les vean los hombres. Ensanchan sus filacterias y alargan sus franjas.
Mat 23:6 Anhelan los primeros puestos en los banquetes, los primeros asientos en las sinagogas
Mat 23:7 y que les saluden en las plazas, y que la gente les llame rabbí.
Mat 23:8 Vosotros, al contrario, no os hagáis llamar rabbí, porque sólo uno es vuestro maestro y todos vosotros sois hermanos.
Mat 23:9 No llaméis padre vuestro a nadie en la tierra, porque sólo uno es vuestro Padre, el celestial.
Mat 23:10 Tampoco os dejéis llamar doctores, porque vuestro doctor es uno sólo: Cristo.
Mat 23:11 Que el mayor entre vosotros sea vuestro servidor.
Mat 23:12 El que se ensalce será humillado, y el que se humille será ensalzado.

Biblia EUNSA

"Palabra del Señor"

"Gloria a ti Señor Jesús"



Meditación:


Los que anhelan los primeros puestos en los banquetes

Hay, sí, hay, los que anhelan los primeros puestos en los banquetes, los primeros asientos en las sinagogas, y hacen mal y maldades para conseguirlo, para tener este tipo de prestigio, y pasan cien años, y nadie los recuerda.

¡Cuánta envidia suscita en algunos la santidad! Porque dicen, algunos pocos, entregar toda su vida a Dios, y pretenden comprar la santidad a la carta, para tener primeros puestos en los banquetes, pero la santidad se gana aguantando las fechorías de los malos, de la vida, y dar siempre el bien, luchando para ser buenos y ser buen ejemplo.

La religión, vivir la fe, ser religioso, no es hacer maldades, es, al contrario, ser como ángeles. Y, se puede, ¡se puede! Conozco a muchos-as religiosos-as que me recuerdan a los Santos Ángeles Celestiales. Tú eres uno-a de ellos, y doy gracias por ti, al Cielo.

¡Alabado sea Dios por todo tu amor al servicio de la Comunidad, de la Santa Iglesia Celestial!

P. Jesús

viernes, 28 de octubre de 2011

EL 28 DE OCTUBRE ES LA FIESTA DE SAN JUDAS.



En nuestra Residencia Santa Marta, estamos celebrando con gozo espiritual, la fiesta de San Judas Tadeo. A las 9 de la mañana se celebró la primera Misa. La Iglesia rebosante de devotos; a lo largo del día es un correr de peregrinos... a presentar sus cuitas al santo.


La Misa Solemne será a las 19 H, donde como todos los años se espera tal afluencia de gente que llena de fervor a todos los presentes



¡San Judas Tadeo, ruega por todos los que a ti acuden!



Oración a San Judas Tadeo

¡Santo Apóstol San Judas, fiel siervo y amigo de Jesús!, la Iglesia te honra e invoca universalmente, como el patrón de los casos difíciles y desesperados. Ruega por mi, estoy solo y sin ayuda.

Te imploro hagas uso del privilegio especial que se te ha concedido, de socorrer pronto y visiblemente cuando casi se ha perdido toda esperanza. Ven en mi ayuda en esta gran necesidad, para que pueda recibir consuelo y socorro del cielo en todas mis necesidades, tribulaciones y sufrimientos, particularmente (haga aquí su petición), y para que pueda alabar a Dios contigo y con todos los elegidos por siempre.

Te doy las gracias glorioso San Judas, y prometo nunca olvidarme de este gran favor, honrarte siempre como mi patrono especial y poderoso y, con agradecimiento hacer todo lo que pueda para fomentar tu devoción. Amén.

domingo, 23 de octubre de 2011

sábado, 22 de octubre de 2011

¡Caminad en compañía del Beato Juan Pablo II!

¡¡Felicidades!!

Oración para implorar favores por intercesión del


Beato Juan Pablo II


Oh Trinidad Santa, te damos gracias por haber concedido a la Iglesia al Beato Juan Pablo II y porque en él has reflejado la ternura de tu paternidad, la gloria de la cruz de Cristo y el esplendor del Espíritu de amor.
El, confiando totalmente en tu infinita misericordia y en la maternal intercesión de María, nos ha mostrado una imagen viva de Jesús Buen Pastor, indicándonos la santidad, alto grado de la vida cristiana ordinaria, como camino para alcanzar la comunión eterna contigo.
Concédenos, por su intercesión, y si es tu voluntad, la gracia que imploramos, con la esperanza de que sea pronto incluido en el número de tus santos. Amén.

Padrenuestro, Avemaría, Gloria.

viernes, 21 de octubre de 2011

Día a día, nuestros residentes

A nuestros residentes les agrada y les motiva participar en todas las actividades de la residencia.


El taller de estimulación cognitiva es una de ellas, ya que muchos no fueron a la escuela y ven en este una gran oportunidad






En la enfermería de mujeres nos muestran el mural que están construyendo estos días para el otoño...todas unas artistas!



miércoles, 19 de octubre de 2011

Hoy miércoles día 19 de octubre dará comiezo los Talleres de oración y vida. Tendrán lugar todos los miércoles a las 17 horas en el salón de actos de nuestra Residencia.


Talleres de Oración y Vida son un servicio para aprender y profundizar en el arte de orar.

Se aprende a entrar en la relación personal con el Señor, con variadas modalidades, desde los primeros pasos hasta las alturas de la contemplación.

Como orar, además de gracia, en cuanto actividad humana es también arte, por eso la organización del taller contiene y ofrece una pedagogía progresiva, un carácter metódico y mucha discipilna.

¿Resultado? Amigos y discípulos del Señor.


OS INVITAMOS A PARTICIPAR

domingo, 16 de octubre de 2011


Domingo XXIX (A) del tiempo ordinario



Texto del Evangelio (Mt 22,15-21): En aquel tiempo, los fariseos se fueron y celebraron consejo sobre la forma de sorprenderle en alguna palabra. Y le envían sus discípulos, junto con los herodianos, a decirle: «Maestro, sabemos que eres veraz y que enseñas el camino de Dios con franqueza y que no te importa por nadie, porque no miras la condición de las personas. Dinos, pues, qué te parece, ¿es lícito pagar tributo al César o no?». Mas Jesús, conociendo su malicia, dijo: «Hipócritas, ¿por qué me tentáis? Mostradme la moneda del tributo». Ellos le presentaron un denario. Y les dice: «¿De quién es esta imagen y la inscripción?». Dícenle: «Del César». Entonces les dice: «Pues lo del César devolvédselo al César, y lo de Dios a Dios».

Comentario: P. Antoni POU OSB Monje de Montserrat (Montserrat, Barcelona, España)
«Lo del César devolvédselo al César, y lo de Dios a Dios»
Hoy, se nos presenta para nuestra consideración una "famosa" afirmación de Jesucristo: «Lo del César devolvédselo al César, y lo de Dios a Dios» (Mt 22,21).

No entenderíamos bien esta frase sin tener en cuenta el contexto en el que Jesús la pronuncia: «los fariseos se fueron y celebraron consejo sobre la forma de sorprenderle en alguna palabra» (Mt 22,15), y Jesús advirtió su malicia (cf. v. 18). Así, pues, la respuesta de Jesús está calculada. Al escucharla, los fariseos quedaron sorprendidos, no se la esperaban. Si claramente hubiese ido en contra del César, le habrían podido denunciar; si hubiese ido claramente a favor de pagar el tributo al César, habrían marchado satisfechos de su astucia. Pero Jesucristo, sin hablar en contra del César, lo ha relativizado: hay que dar a Dios lo que es de Dios, y Dios es Señor incluso de los poderes de este mundo.

El César, como todo gobernante, no puede ejercer un poder arbitrario, porque su poder le es dado en "prenda" o garantía; como los siervos de la parábola de los talentos, que han de responder ante el Señor por el uso de los talentos. En el Evangelio de san Juan, Jesús dice a Pilatos: «No tendrías contra mí ningún poder, si no se te hubiera dado de arriba» (Jn 19,10). Jesús no quiere presentarse como un agitador político. Sencillamente, pone las cosas en su lugar.

La interpretación que se ha hecho a veces de Mt 22,21 es que la Iglesia no debería "inmiscuirse en política", sino solamente ocuparse del culto. Pero esta interpretación es totalmente falsa, porque ocuparse de Dios no es sólo ocuparse del culto, sino preocuparse por la justicia, y por los hombres, que son los hijos de Dios. Pretender que la Iglesia permanezca en las sacristías, que se haga la sorda, la ciega y la muda ante los problemas morales y humanos de nuestro tiempo, es quitar a Dios lo que es de Dios. «La tolerancia que sólo admite a Dios como opinión privada, pero que le niega el dominio público (…) no es tolerancia, sino hipocresía» (Benedicto XVI).

viernes, 14 de octubre de 2011

Festividad de Santa Teresa de Jesus




Hoy es un día grande para nuestra Congregación, pues en esta fecha muchas hermanitas celebran sus Bodas de Oro, Bodas de Plata, Profesiones simples y profesiones perpetuas, asi como Tomas de hábito, esdecir el inicio del noviciado para auqellas que inician su andadura en el seguimiento de Cristo como Hermanitas.






DESDE AQUI DESEAMOS MUCHAS FELICIDADES A TODAS LAS HERMANITAS




martes, 11 de octubre de 2011

NUESTRA SEÑORA DEL PILAR



Según una venerada tradición, la Santísima Virgen María se manifestó en Zaragoza sobre una columna o pilar, signo visible de su presencia. Esta tradición encontró su expresión cultual en la misa y en el Oficio que, para toda España, decretó Clemente XII. Pío VII elevó la categoría litúrgica de la fiesta. Pío XII otorgó a todas las naciones sudamericanas la posibilidad de celebrar la misma misa que se celebraba en España.

* El Pilar, lugar privilegiado de oración y de gracia (Del Oficio Divino)

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Historia de la Virgen del Pilar
La tradición, tal como ha surgido de unos documentos del siglo XIII que se conservan en la catedral de Zaragoza, se remonta a la época inmediatamente posterior a la Ascensión de Jesucristo, cuando los apóstoles, fortalecidos con el Espíritu Santo, predicaban el Evangelio. Se dice que, por entonces (40 AD), el Apóstol Santiago el Mayor, hermano de San Juan e hijo de Zebedeo, predicaba en España. Aquellas tierras no habían recibido el evangelio, por lo que se encontraban atadas al paganismo. Santiago obtuvo la bendición de la Santísima Virgen para su misión.

Los documentos dicen textualmente que Santiago, "pasando por Asturias, llegó con sus nuevos discípulos a través de Galicia y de Castilla, hasta Aragón, el territorio que se llamaba Celtiberia, donde está situada la ciudad de Zaragoza, en las riberas del Ebro. Allí predicó Santiago muchos días y, entre los muchos convertidos eligió como acompañantes a ocho hombres, con los cuales trataba de día del reino de Dios, y por la noche, recorría las riberas para tomar algún descanso".

En la noche del 2 de enero del año 40, Santiago se encontraba con sus discípulos junto al río Ebro cuando "oyó voces de ángeles que cantaban Ave, María, gratia plena y vio aparecer a la Virgen Madre de Cristo, de pie sobre un pilar de mármol". La Santísima Virgen, que aún vivía en carne mortal, le pidió al Apóstol que se le construyese allí una iglesia, con el altar en torno al pilar donde estaba de pie y prometió que "permanecerá este sitio hasta el fin de los tiempos para que la virtud de Dios obre portentos y maravillas por mi intercesión con aquellos que en sus necesidades imploren mi patrocinio".

Desapareció la Virgen y quedó ahí el pilar. El Apóstol Santiago y los ocho testigos del prodigio comenzaron inmediatamente a edificar una iglesia

en aquel sitio y, con el concurso de los conversos, la obra se puso en marcha con rapidez. Pero antes que estuviese terminada la Iglesia, Santiago ordenó presbítero a uno de sus discípulos para servicio de la misma, la consagró y le dio el título de Santa María del Pilar, antes de regresarse a Judea. Esta fue la primera iglesia dedicada en honor a la Virgen Santísima.

Muchos historiadores e investigadores defienden esta tradición y aducen que hay una serie de monumentos y testimonios que demuestran la existencia de una iglesia dedicada a la Virgen de Zaragoza. El mas antiguo de estos testimonios es el famoso sarcófago de Santa Engracia, que se conserva en Zaragoza desde el siglo IV, cuando la santa fue martirizada. El sarcófago representa, en un bajo relieve, el descenso de la Virgen de los cielos para aparecerse al Apóstol Santiago.

Asimismo, hacia el año 835, un monje de San Germán de París, llamado Almoino, redactó unos escritos en los que habla de la Iglesia de la Virgen María de Zaragoza, "donde había servido en el siglo III el gran mártir San Vicente", cuyos restos fueron depositados por el obispo de Zaragoza, en la iglesia de la Virgen María. También está atestiguado que antes de la ocupación musulmana de Zaragoza (714) había allí un templo dedicado a la Virgen.

La devoción del pueblo por la Virgen del Pilar se halla tan arraigada entre los españoles y desde épocas tan remotas, que la Santa Sede permitió el establecimiento del Oficio del Pilar en el que se consigna la aparición de la Virgen del Pilar como "una antigua y piadosa creencia".

Numerosos milagros de la Virgen

En 1438 se escribió un Libro de milagros atribuidos a la Virgen del Pilar, que contribuyó al fomento de la devoción hasta el punto de que, el rey Fernando el católico dijo: "creemos que ninguno de los católicos de occidente ignora que en la ciudad de Zaragoza hay un templo de admirable devoción sagrada y antiquísima, dedicado a la Sta.y Purísima Virgen y Madre de Dios, Sta. María del Pilar, que resplandece con innumerables y continuos milagros".

El Gran milagro del Cojo de Calanda (1640) Se trata de un hombre a quien le amputaron una pierna. Un día años mas tarde, mientras soñaba que visitaba la basílica de la Virgen del Pilar, la pierna volvió a su sitio. Era la misma pierna que había perdido. Miles de personas fueron testigos y en la pared derecha de la basílica hay un cuadro recordando este milagro.

El Papa Clemente XII señaló la fecha del 12 de octubre para la festividad particular de la Virgen del Pilar, pero ya desde siglos antes, en todas las iglesias de España y entre los pueblos sujetos al rey católico , se celebraba la dicha de haber tenido a la Madre de Dios en su región, cuando todavía vivía en carne mortal.

Tres rasgos peculiares que caracterizan a la Virgen del Pilar y la distinguen de las otras:

1- Se trata de una venida extraordinaria de la Virgen durante su vida mortal. A diferencia de las otras apariciones la Virgen viene cuando todavía vive en Palestina: ¨Con ninguna nación hizo cosa semejante", cantará con razón la liturgia del 2 de enero, fiesta de la Venida de la Virgen.

2- La Columna o Pilar que la misma Señora trajo para que, sobre él se construyera la primera capilla que, de hecho, sería el primer Templo Mariano de toda la Cristiandad.

3- La vinculación de la tradición pilarista con la tradición jacobea (del Santuario de Santiago de Compostela). Por ello, Zaragoza y Compostela, el Pilar y Santiago, han constituido dos ejes fundamentales, en torno a los cuales ha girado durante siglos la espiritualidad de la patria española.


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Simbolismo del pilar
El pilar o columna: la idea de la solidez del edificio-iglesia con la de la firmeza de la columna-confianza en la protección de María.

La columna es símbolo del conducto que une el cielo y la tierra, "manifestación de la potencia de Dios en el hombre y la potencia del hombre bajo la influencia de Dios". Es soporte de los sagrado, soporte de la vida cotidiana. María, la puerta del cielo, la escala de Jacob, ha sido la mujer escogida por Dios para venir a nuestro mundo. En ella la tierra y el cielo se han unido en Jesucristo.

Las columnas garantizan la solidez del edificio, sea arquitectónico o social. Quebrantarlas es amenazar el edificio entero. La columna es la primera piedra del templo, que se desarrolla a su alrededor; es el eje de la construcción que liga entre si los diferentes niveles. María es también la primera piedra de la Iglesia, el templo de Dios; en torno a ella, lo mismo que los apóstoles reunidos el día de pentecostés, va creciendo el pueblo de Dios; la fe y la esperanza de la Virgen alientan a los cristianos en su esfuerzo por edificar el reino de Dios.

Vemos en Ex 13, 21-22, que una columna de fuego por la noche acompañaba al pueblo de Israel peregrino en el desierto, dirigiendo su itinerario.

En la Virgen del Pilar el pueblo ve simbolizada "la presencia de Dios, una presencia activa que, guía al pueblo de elegido a través de las emboscadas de la ruta".




La Basílica de la Virgen del Pilar es la mas extraordinaria que tiene España como prueba de una antiquísima y profunda devoción por la Santísima Virgen María. Esa gran basílica mariana con sus once cúpulas y sus cuatro campanarios es famosa en el mundo entero, puesto que en el año 40 AD se apareció ahí la Madre de Dios al Apóstol Santiago. La Virgen vino mientras aún vivía en la tierra. Es decir apareció en carne mortal. Desde entonces, a través de los siglos, ha mostrado su protección especial con repetidas gracias, milagros y portentos, ganándose la piedad de los españoles, que le tributan culto con gran devoción.

El interior de la Basílica es de una gran belleza y una serena grandiosidad. Toda la traza del templo está acomodada a la idea, siempre defendida por el Cabildo del Pilar, de no mover de su sitio la Sagrada Columna de la Virgen.

La Basílica de Nuestra Señora del Pilar es visitada por millares de personas cada día. Son los hijos que vienen a rezarle a su madre quien nunca los abandona.

Historia de la Basílica
Al principio del siglo XVI, el arzobispo Alonso de Aragón, hijo del rey católico, transformó en estilo gótico la iglesia anterior, erigida en el lugar mismo de la aparición de la Virgen, que quedó así incluida desde entonces dentro del templo; el lugar mas sagrado de esta capilla lo constituía y lo sigue constituyendo el que ocupa la santa columna, su mas preciada reliquia, en la que se asienta la imagen de la Virgen.
Por la necesidad que se vio de cobijar a las inmensas muchedumbres de peregrinos y poder atender mejor a los numerosos asistentes en los actos de culto, en 1681 se puso la primera piedra del nuevo templo, donde se incluyó también la santa capilla, conservando intacto el lugar de asentamiento de la columna de la Virgen. En 1872 se concluyeron las diversas capillas y cúpulas, mas tarde se añadirán las cuatro torres, la última se concluyó en 1961.

Los sitios de Zaragoza, (1808) durante la guerra de independencia, dieron notoriedad a la devoción de la Virgen del Pilar. Junto a su manto se reunía el pueblo buscando en ella protección y aliento; se le representaba velando el sueño de los soldados y se le nombró: "capitana de la tropa aragonesa". Un siglo mas tarde en 1908, la devoción a la Virgen del Pilar, afianzo su dimensión hispánica con el tributo que se le ofreció de todas las banderas de las naciones hispanoamericanas, que cuelgan actualmente en los muros del Pilar.

El Papa Juan Pablo II en 1984, al hacer escala en su viaje a Santo Domingo para iniciar la conmemoración del descubrimiento de América, reconoció a la Virgen del Pilar como "patrona de la hispanidad".

No nos podemos olvidar la importancia que tuvo en aumentar la devoción a la Virgen del Pilar, la guerra civil de 1936-1939. Las tres bombas que cayeron sobre el templo no estallaron y muchos vieron en este hecho un signo de la especial protección de la Virgen sobre las tropas nacionalistas. De toda España acudían peregrinos a pie a dar gracias a la Virgen por haberlos librado de los peligros de la guerra.

Actividades en el Santuario del Pilar: Misas, confesiones, rezo del Santo Rosario en la capilla de la Virgen, paso de los niños (a la Virgen del Pilar) y museo pilarista.

Información para visitas al Pilar

domingo, 9 de octubre de 2011

Contemplar el Evangelio

Audio: escuchar descargar suscribirse (podcast) Día litúrgico: Domingo XXVIII (A) del tiempo ordinario

Contemplar el Evangelio de hoyAudio: escuchar descargar suscribirse (podcast) Día litúrgico:


Texto del Evangelio (Mt 22,1-14): En aquel tiempo, tomando Jesús de nuevo la palabra les habló en parábolas, diciendo: «El Reino de los Cielos es semejante a un rey que celebró el banquete de bodas de su hijo. Envió sus siervos a llamar a los invitados a la boda, pero no quisieron venir. Envió todavía otros siervos, con este encargo: Decid a los invitados: ‘Mirad, mi banquete está preparado, se han matado ya mis novillos y animales cebados, y todo está a punto; venid a la boda’.

»Pero ellos, sin hacer caso, se fueron el uno a su campo, el otro a su negocio; y los demás agarraron a los siervos, los escarnecieron y los mataron. Se airó el rey y, enviando sus tropas, dio muerte a aquellos homicidas y prendió fuego a su ciudad.

»Entonces dice a sus siervos: ‘La boda está preparada, pero los invitados no eran dignos. Id, pues, a los cruces de los caminos y, a cuantos encontréis, invitadlos a la boda’. Los siervos salieron a los caminos, reunieron a todos los que encontraron, malos y buenos, y la sala de bodas se llenó de comensales.

»Entró el rey a ver a los comensales, y al notar que había allí uno que no tenía traje de boda, le dice: ‘Amigo, ¿cómo has entrado aquí sin traje de boda?’. Él se quedó callado. Entonces el rey dijo a los sirvientes: ‘Atadle de pies y manos, y echadle a las tinieblas de fuera; allí será el llanto y el rechinar de dientes’. Porque muchos son llamados, mas pocos escogidos».

Comentario: P. Julio César RAMOS González SDB (Salta, Argentina)
«Id a los cruces de los caminos y, a cuantos encontréis, invitadlos a la boda»
Hoy, Jesús nos muestra al rey (el Padre), invitando —por medio de sus “siervos” (los profetas), al banquete de la alianza de su Hijo con la humanidad (la salvación). Primero lo hizo con Israel, «pero no quisieron venir» (Mt 22,3). Ante la negativa, no deja el Padre de insistir: «Mirad mi banquete está preparado, (...) y todo está a punto; venid a la boda» (v. 4). Pero ese desaire, de escarnio y muerte de los siervos, suscita el envío de tropas, la muerte de aquellos homicidas y la quema de “su” ciudad (cf. Mt 22,6-7): Jerusalén.

Así es que, por otros “siervos” (apóstoles) —enviados a ir por «los cruces de los caminos» (Mt 22,9): «Id, pues, y haced discípulos a todas las gentes bautizándolas...», dirá más tarde el Señor Jesús en Mt 28,19— fuimos invitados nosotros, el resto de la humanidad, es decir, «todos los que encontraron, malos y buenos, y la sala de bodas se llenó de comensales» (Mt 22,10): la Iglesia. Aún así, la cuestión, no es sólo estar en la sala de bodas por la invitación, sino que, tiene que ver también y mucho, con la dignidad con la que se está («traje de boda», cf. v. 12). San Jerónimo comentó al respecto: «Los vestidos de fiesta son los preceptos del Señor y las obras cumplidas según la Ley y el Evangelio que son las vestiduras del hombre nuevo». Es decir, las obras de la caridad con las que se debe acompañar a la fe.

Conocemos que Madre Teresa, todas las noches, salía a las calles de Calcuta a recoger moribundos para darles, con amor, un buen morir: limpios, bien arropados y, si era posible, bautizados. Cierta vez comentó: «No tengo miedo de morir, porque cuando esté delante del Padre, habrá tantos pobres que le entregué con el traje de bodas que sabrán defenderme». ¡Bienaventurada ella! —Aprendamos la lección nosotros.

sábado, 8 de octubre de 2011

Poesía a nuestros mayores

El anciano es un tesoro
que debemos respetar,
necesita amor,cariño,
comprensión y caridad.

En ningún hogar del mundo
falle nuca un buen anciano;
sus ejemplos nos animan,
ellos nos dieron la mano.

Si consejos necesitas,
el bueno te los da,
como las flores del campo,
como rosas del rosal.

Bondad, belleza, atractivo
fueron, como puedes ver,
estos ancianos de hoy,
que fueron niños ayer.

Héroes de vida oculta,
lucharon como guereros
para dejar a sus hijos
de sus tronos herederos.

Rocío de la mañana
y perlas cuajadas son.
A mis padres ancianitos,
CUIDAMELOS BIEN, SEÑOR
.


jueves, 6 de octubre de 2011

LA VIRGEN DEL ROSARIO





Las Quince Promesas de la Virgen María a quienes recen el Rosario


1. Aquellos que recen con enorme fé el Rosario recibirán gracias especiales.

2. Prometo mi protección y las gracias mas grandes a aquellos que recen el Rosario.

3. El Rosario es una arma poderosa para no ir al infierno: destruye los vicios, disminuye los pecados y nos defiende de las herejías.

4. Se otorgará la virtud y las buenas obras abundarán, se otorgará la piedad de Dios para las almas, rescatará a los corazones de la gente de su amor terrenal y vanidades, y los elevará en su dedeo por las cosas eternas. Las mismas almas se santificarán por este medio.

5. El alma que se encomiende a mi en el Rosario no perecerá.

6. Quien rece el Rosario devotamente, y lleve los misterios como testimonio de vida no conocerá la desdicha. Dios no lo castigará en su justicia, no tendrá una muerte violenta, y si es justo, permanecerá en la gracia de Dios, y tendrá la recompensa de la vida eterna.

7. Aquel que sea verdadero devoto del Rosario no perecerá sin los Sagrados Sacramentos.

8. Aquellos que recen con mucha fe el Santo Rosario en vida y en la hora de su muerte encontrarán la luz de Dios y la plenitud de su gracia, en la hora de la muerte participarán en el paraíso por los méritos de los Santos.

9. Libraré del purgatorio a aquienes recen el Rosario devotamente.

10. Los niños devotos al Rosario merecerán un alto grado de Gloria en el cielo.

11. Obtendrán todo lo que me pidan mediante el Rosario.

12. Aquellos que propaguen mi Rosario serán asistidos por mí en sus necesidades.

13. Mi hijo me ha concedido que todo aquel que se encomiende a mi al rezar el Rosario tendrá como intercesores a toda la corte celestial en vida y a la hora de la muerte.

14. Son mis niños aquellos que recitan el Rosario, y hermanos y hermanas de mi único hijo, Jesus Cristo.

15. La devoción a mi Rosario es una gran señal de profecía.

sábado, 1 de octubre de 2011

Domingo 2 de Octubre de 2.011

San Mateo 21, 33-43

Edificó una torre

Mat 21:33 Dijo Jesús a los sumos sacerdotes y a los senadores del pueblo: <Mat 21:34 Cuando se acercó el tiempo de los frutos, envió a sus siervos a los labradores para recibir sus frutos.
Mat 21:35 Pero los labradores agarraron a los siervos y a uno lo golpearon, a otro lo mataron y a otro lo lapidaron.
Mat 21:36 De nuevo envió a otros siervos, más numerosos que los primeros, pero les hicieron lo mismo.
Mat 21:37 Por último les envió a su hijo, pensando: "A mi hijo lo respetarán".
Mat 21:38 Pero los labradores, al ver al hijo, se dijeron: "Éste es el heredero. Vamos, lo mataremos y nos quedaremos con su heredad".
Mat 21:39 Y lo agarraron, lo sacaron fuera de la viña y lo mataron.
Mat 21:40 Cuando venga el amo de la viña, ¿qué hará con aquellos labradores?
Mat 21:41 Le contestaron: -A esos malvados les dará una mala muerte, y arrendará la viña a otros labradores que le entreguen los frutos a su tiempo.
Mat 21:42 Jesús les dijo: -¿Acaso no habéis leído en las Escrituras: "La piedra que rechazaron los constructores", "ésta ha llegado a ser la piedra angular." "Es el Señor quien ha hecho esto" "y es admirable a nuestros ojos"?
Mat 21:43 "Por esto os digo que se os quitará el Reino de Dios y se entregará a un pueblo que rinda sus frutos.

Biblia EUNSA

OFRENDA AL AMOR - SANTA TERESITA DEL NIÑO JESÚS




miércoles, 28 de septiembre de 2011

martes, 27 de septiembre de 2011

domingo, 25 de septiembre de 2011

Homilía de la Vigilia con los jóvenes en la Feria de Friburgo



Queridos jóvenes amigos:

He pensado con gozo todo el día en esta noche, en la que estaría aquí con vosotros, unidos en la oración. Algunos habéis participado tal vez en la Jornada Mundial de la Juventud, donde experimentamos esa atmósfera especial de tranquilidad, de profunda comunión y de alegría interior que caracteriza una vigilia nocturna de oración. Espero que también nosotros podamos tener esa misma experiencia en este momento: que el Señor nos toque y nos haga testigos gozosos, que oran juntos y se hacen responsables los unos de los otros, no solamente esta noche, sino también durante toda la vida.

En todas las iglesias, en las catedrales y conventos, en cualquier lugar donde se reúnen los fieles para celebrar la Vigilia pascual, la más santa de todas las noches, ésta se inaugura encendiendo el cirio pascual, cuya luz se trasmite a todos los participantes. Una pequeña llama irradia en muchas luces e ilumina la casa de Dios en tinieblas. En este maravilloso rito litúrgico, que hemos imitado en está vigilia de oración, se nos revela mediante signos más elocuentes que las palabras el misterio de nuestra fe cristiana. Jesús, que dice de sí mismo: "Yo soy la luz del mundo" (Jn 8, 12), hace brillar nuestra vida, para que se cumpla lo que acabamos de escuchar en el Evangelio: "Vosotros sois la luz del mundo" (Mt 5, 14).

No son nuestros esfuerzos humanos o el progreso técnico de nuestro tiempo los que aportan luz al mundo. Una y otra vez, debemos experimentar que nuestro esfuerzo por un orden mejor y más justo tiene sus límites. El sufrimiento de los inocentes y, más aún, la muerte de cualquier hombre, producen una oscuridad impenetrable que, quizás, con nuevas experiencias, se esclarece de momento, como un rayo en la noche. Pero, al final, queda una oscuridad angustiosa.

Puede haber en nuestro entorno tiniebla y oscuridad y, sin embargo, vemos una luz: una pequeña llama, minúscula, que es más fuerte de la oscuridad, en apariencia poderosa e insuperable. Cristo, resucitado de entre los muertos, brilla en el mundo, y lo hace de la forma más clara, precisamente allí donde según el juicio humano todo parece sombrío y sin esperanza. Él ha vencido a la muerte, vive, y la fe en Él, como una pequeña luz, penetra todo lo que es oscuridad y zozobra.

Ciertamente, quien cree en Jesús no siempre ve solamente el sol en la vida, casi como si pudiera ahorrarse sufrimientos y dificultades; ahora bien, tiene siempre una luz clara que le muestra el camino hacia la vida en abundancia (cf. Jn 10, 10). Los ojos de los que creen en Cristo vislumbran aun en la noche más oscura una luz, y ven ya la claridad de un nuevo día.

La luz no se queda sola. A su alrededor se encienden otras luces. Bajo sus rayos se delinean los contornos del ambiente, de forma que podemos orientarnos. No vivimos solos en el mundo. Precisamente en las cosas importantes de la vida tenemos necesidad de otras personas. Así, en particular, no estamos solos en la fe, somos eslabones de la gran cadena de los creyentes.

Ninguno llega a creer si no está sostenido por la fe de los otros y, por otra parte, con mi fe, contribuyo a confirmar a los demás en la suya. Nos ayudamos recíprocamente a ser ejemplos los unos para los otros, compartimos con los otros lo que es nuestro, nuestros pensamientos, nuestras acciones y nuestro afecto. Y nos ayudamos mutuamente a orientarnos, a discernir nuestro puesto en sociedad.

Queridos amigos, "Yo soy la luz del mundo – vosotros sois la luz del mundo", dice el Señor. Es algo misterioso y grandioso que Jesús diga lo mismo de sí y de cada uno de nosotros, es decir, "ser luz". Si creemos que Él es el Hijo de Dios, que ha sanado los enfermos y resucitado los muertos, más aún, que Él ha resucitado del sepulcro y vive verdaderamente, entonces comprendemos que Él es la luz, la fuente de toda las luces de este mundo.

Nosotros, en cambio, una y otra vez experimentamos el fracaso de nuestros esfuerzos y el error personal a pesar de nuestra mejor intención. Por lo que se ve, el mundo en que vivimos, no obstante los progresos técnicos nunca llega en definitiva a ser mejor. Sigue habiendo guerras, terror, hambre y enfermedades, pobreza extrema y represión sin piedad. E incluso aquellos que en la historia se han creído "portadores de luz", pero sin haber sido iluminados por Cristo, única luz verdadera, no han creado ciertamente paraíso terrenal alguno, sino que, por el contrario, han instaurado dictaduras y sistemas totalitarios, en los que se ha sofocado hasta la más pequeña chispa de humanidad.

Llegados a este punto, no debemos silenciar el hecho de que el mal existe. Lo vemos en tantos lugares del mundo; pero lo vemos también, y esto nos asusta, en nuestra vida. Sí, en nuestro propio corazón existe la inclinación al mal, el egoísmo, la envidia, la agresividad. Quizás, con una cierta autodisciplina, esto puede ser de algún modo controlable. Pero es más difícil con formas de mal más bien oscuras, que pueden envolvernos como una niebla difusa, como la pereza, la lentitud en querer y hacer el bien.

En la historia, algunos finos observadores han señalado frecuentemente que el daño a la Iglesia no lo provocan sus adversarios, sino los cristianos mediocres. ¿Cómo puede entonces decir Cristo que los cristianos, y también aquellos cristianos débiles y frecuentemente mediocres, son la luz del mundo? Quizás lo entendiéramos si Él gritase: ¡Convertíos! ¡Sed la luz del mundo! ¡Cambiad vuestra vida, hacedla clara y resplandeciente! ¿No debemos quizás quedar sorprendidos de que el Señor no nos dirija una llamada de atención, sino que afirme que somos la luz del mundo, que somos luminosos y que brillamos en la oscuridad?

Queridos amigos, el apóstol san Pablo, se atreve a llamar "santos" en muchas de sus cartas a sus contemporáneos, los miembros de las comunidades locales. Con ello, se subraya que todo bautizado es santificado por Dios, incluso antes de poder hacer obras buenas y actos concretos. En el Bautismo, el Señor enciende por decirlo así una luz en nuestra vida, una luz que el catecismo llama la gracia santificante. Quien conserva dicha luz, quien vive en la gracia, es ciertamente santo.

Queridos amigos, tantas veces, se ha caricaturizado la imagen de los santos y se los ha presentado de modo distorsionado, como si ser santos significase estar fuera de la realidad, ingenuos y sin alegría. A menudo, se piensa que un santo sea aquel que lleva a cabo acciones ascéticas y morales de altísimo nivel y que precisamente por ello se puede venerar, pero nunca imitar en la propia vida. Qué equivocada y decepcionante es esta opinión. No existe algún santo, excepto la bienaventurada Virgen María, que no haya conocido el pecado y que nunca haya caído en él.

Queridos amigos, Cristo no se interesa tanto por las veces que vaciláis o caéis en la vida, sino por las veces que os levantáis. No exige acciones extraordinarias, quiere, en cambio, que su luz brille en vosotros. No os llama porque sois buenos y perfectos, sino porque Él es bueno y quiere haceros amigos suyos. Sí, vosotros sois la luz del mundo, porque Jesús es vuestra luz. Vosotros sois cristianos, no porque hayáis cosas especiales y extraordinarias, sino porque Él, Cristo, es vuestra vida. Sois santos porque su gracia actúa en vosotros.

Queridos amigos, esta noche, en la que estamos reunidos en oración en torno al único Señor, entrevemos la verdad de la Palabra de Cristo, según la cual no se puede ocultar una ciudad puesta en lo alto de un monte. Esta asamblea brilla en los diversos sentidos de la palabra: en la claridad de innumerables luces, en el esplendor de tantos jóvenes que creen en Cristo. Una vela puede dar luz solamente si la llama la consume. Sería inservible si su cera no alimentase el fuego.

Permitid que Cristo arda en vosotros, aun cuando ello comporte a veces sacrificio y renuncia. No temáis perder algo y quedaros al final, por así decirlo, con las manos vacías.

Tened la valentía de usar vuestros talentos y dones al servicio del Reino de Dios y de entregaros vosotros mismos, como la cera de la vela, para que el Señor ilumine la oscuridad a través de vosotros. Tened la osadía de ser santos brillantes, en cuyos ojos y corazones reluzca el amor de Cristo, llevando así luz al mundo. Confío que vosotros y tantos otros jóvenes aquí en Alemania sean llamas de esperanza que no queden ocultas. "Vosotros sois la luz del mundo". Amén